Pasan los años y algunos ingredientes de la vida dejan de ser moda para ser costumbre hasta el día que descubrimos que hicimos casi todo el recorrido en la senda paralela de ciertos fenómenos sociales, culturales, artísticos, estéticos, todos afines a nuestra generación. Y así sucede que compartimos sentimientos muy difíciles de explicar con un montón de personas que tal vez ni siquiera conocemos, incluso de lugares muy lejanos del mundo.
Fuimos, somos, seremos parte de lo que estuvo sucediendo esos años, y al llegar al promedio del camino podemos mirar hacia atrás y ver las postales del futuro que no fue, pero también las fotos que supieron hacer la transición del negativo de Kodak a la era digital sin siquiera sufrir un rasguño. Todo eso es crecer y para todo eso estamos preparados desde que nacemos. Sin embargo, en este rodar en el tiempo el ser humano, que es un animal que se adapta con cierta elegancia a los aconteceres, no puede con dos flagelos: La ausencia y a la incertidumbre.
Hoy es 11 de Agosto de 2017, hoy hace 58 años que Gustavo Adrián Cerati llegó a esta ruta para tomar el rol de los que nunca miran hacia atrás, de los que se adelantan millas incalculables liderando la caravana, abriendo caminos, despreocupados del tiempo y las distancias, elevados del resto… Simplemente inalcanzables…
Nos pasa todos los días y hoy nos pasa más que nunca. Desde la desesperante incertidumbre de no saber si nos vas a volver a encandilar con tu caudal obsceno de luz te extrañamos todos los días un poco más.
Feliz cumpleaños, Gustavo
Ayer y mañana, Siempre es Hoy…
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